Hoy es un día de mucho calor, bien de verano. Es por eso que dedicar este post para referirnos a los golpes de calor y su prevención nos parece oportuno.
El golpe de calor es un aumento de la temperatura del cuerpo ante el cual hay una pérdida de agua y sales esenciales. Se puede presentar en el momento o cuando hay varios días seguidos de altas temperaturas.
Los sintomas son: mucha sed, boca seca, más de 39 grados de temperatura, sensación de mucho calor, transpiración excesiva, piel seca, debilidad, cansancio, mareos, desmayo, agitación, vértigo, calambres, nauseas, vómitos, falta de apetito, dolor de estómago, dolor de cabeza, confusión.
Los bebés cuando tienen un golpe de calor tienen llanto inconsolabre, la piel muy irritada por transpiración en el cuello, axilas, pecho.
Es importante saber prevenir esta situación, a los bebés si son lactantes dandoles el pecho de manera más seguida, a los chicos ofreciéndoles agua aunque no pidan. Vestirlos frescos, con ropa holgada, de colores claros. Evitar su exposición al sol, especialmente en las horas del mediodía, si están al aire libre a la sombra. Si van a estar expuestos al sol siempre con sombrero y protector solar.
Es importante permanecer en lugares ventilados.
Si se presenta un cuadro de golpe de calor, ofrecer agua fresca, intentar bajar la temperatura corporal con hielo o un baño de agua helada y no administrar antifebriles. Siempre consultá al médico.
Fuente: Ministerio de Salud. Presidencia de la Nación.
